El modelo Flipped Classroom permite una inversión, en su doble acepción: por un lado se invierten los tiempos y espacios de aprendizaje; y por otro, al producirse ese cambio, se invierte en una mayor disposición de tiempo de aula, para realizar tareas prácticas y de desarrollo. No se trata, por lo tanto, ni de mandar más deberes, ni que todo se limite a ver vídeos. Lo importante debe pasar en el aula.
Nuestra clase, unitaria, engloba alumnado de Educación Infantil y Educación Primaria. Desde fuera, puede parecer que este tipo de aulas son un caos, al estar todos mezclados. Y lo es, pero de un modo enriquecedor, puesto que el saber circula desde los mayores hasta los pequeños…y viceversa. Ahora bien, ¿cómo explicar algo, atendiendo a los diferentes niveles curriculares y personales? Yo busqué parte de la solución (ya sabemos que esto no es una ciencia exacta), en la adaptación del modelo FC, a las condiciones de este entorno educativo. Dicho modelo, permite integrar metodología inductivas, como el aprendizaje basado en problemas o proyectos, o el Just in Time Teaching (enseñanza justo en el momento); las cuales solemos utilizar en algunas áreas y momentos.